Se usan localizadores GPS que consiguen monitorizar los movimientos de nuestras merinas en el pastoreo diario así como los movimientos trashumantes entre fincas. Pudiendo certificar un sistema de cría totalmente en extensivo aprovechando los recursos vegetales de las fincas durante todo el año.
Por otro lado conseguimos una trazabilidad total de los corderos hasta su venta al consumidor, certificando el bienestar animal, tanto en su cría, como en posterior transporte a matadero…
Logramos un producto de cercanía, con calidad natural.
Todos estos datos se suministran en el código QR que acompaña en la etiqueta en cada pedido.