Este modelo, actualizado por las nuevas generaciones, tiene especial cuidado en evitar el sobrepastoreo con el fin de mantener el equilibrio ecológico.
En nuestro caso las estaciones que ocupan dehesa y sierra son los 9 meses de otoño, invierno y primavera. Las características climáticas de Córdoba hacen que en el verano se realice un movimiento hacia unos nuevos pastos estivales, para aprovechamiento de las rastrojeras (cereal y oleaginosas) en la campiña cordobesa.